Extraordinariamente precoz como ejecutante y compositor de música, a los 5 años ya componía peque˜as piezas y hacia los 11 compuso su primera opereta, Bastian y Bastienne. A su época de organista de la capilla arsovispal de Salzburgo, pertenecen a la Sinfonía Concertante, las óperas Idomeneo y Thamos, Reina de Egipto y Dos Misas, la de La Coronación y la Misa solemnis. A partir de 1782 compuso sus mejores obras: Las sinfonías Haffner, Linz, Praga, Las No: 39, 40 y la de Júpiter; los seis cuartetos de cuerda dedicados a Haydn y las óperas Don Geovanni, las Bodas de Fígaro, Cosí fantute y la Flauta mágica.